Discutir sobre la acústica de la oficina supone principalmente hablar del open space y su efecto sobre la eficiciencia. No es ninguna sorpresa pues esta solución viene cargada con una especie de paradoja. En lugar de apoyar una comunicación efectiva y el libre flujo de informacion, es completamente inútil si no se equilibra con el ruido en la oficina.
El Doctor Vinesh Oommen del Instituto de Salud e Innovación Biomédica de la Universidad de Queensland llevó a cabo un estudio sobre el open space y concluyó que los empleados de esas áreas se enfrentan a una serie de problemas. Los más molestos son: falta de privacidad, problemas de salud, estimulación excesiva e incomodidad acústica, que desafortunadamente causan baja satisfacción y productividad. El noventa por cierto de los empleados creen que cambiarse a un open space tiene una influencia negativa en ellos y su trabajo; y también puede aumentar la conflictividad.
Oomen cree que estas conclusiones hacen dudar a los empresarios a la hora de introducir estos espacios en sus firmas. Oficinas más pequeñas y privadas son más proclives a tener oficinas adaptadas a las necesidades del espacio. Sin embargo, son menos beneficiosas desde el punto de vista económico. El diseño open space permite a una compañía recortar los costes de construcción en un 20%, y garantiza condiciones de trabajo óptimas, aunque vale la pena invertir en soluciones de mejora de la insonorización de la oficina.
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El problema del sonido se convierte en el mayor inconveniente en estos días:
Los productos acústicos se convierten en una necesidad, y definen el objetivo de la creación de zonas individuales sin la necesidad de poner barreras físicas que más tarde puedan ser difíciles de modificar- explica el diseñador Dymitr Malcew.
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Existen dos problemas principales conectados con trabajar en un open space: niveles altos de ruido y la posibilidad del sonido alcanzando todos los rincones de la habitación. Puedes minimizar ambos introduciendo paneles de partición, paneles acústicos (p.ej. paneles acústicos MDD) con los muy populares y suaves tejidos, de textura irregular. Las cabinas acústicas son también muy cotizadas, pues pueden reemplazar a las “habitaciones silenciosas”. Otorgan a los empleados comodidad en el trabajo de una manera muy sencilla, bien para una reunión o llamadas.
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Las cabinas acústicas son compatibles con la idea del trabajo dinámico. Se pueden ajustar a las tareas tan bien o incluso mejor que el clásico escritorio. Ivette Tietema, una investigadora psicoacústica cree que el 75% del confort es estrictamente psicológico. La idea del trabajo en equipo supone pues, trabajar en conjunto con la idea del indiviudalismo.